La serenidad es un estado mental que se produce de una concepción de la vida alejada de la angustia que producen los problemas imaginarios de la falta de aceptación.
Se tiene que aceptar lo que se vive hoy si se quiere cambiar esta experiencia, hacer algo, por mínimo que sea. Para ello, necesitamos una visión de lo que queremos para el futuro.
Esta visión debe ser clara y haberse sostenido durante algún tiempo, contra cualquier clase de frustración. Implica vivir con un fin en mente. La serenidad llega cuando estamos seguro de que vamos a lograrlo pero también que estamos haciendo lo necesario. Así, no debemos frustrarnos ni hacer más de lo debido.
A la seguridad de la visión debe agregarse el alejamiento del pesimismo y la confianza en que se tienen muchas opciones para tener éxito.
sábado, 6 de agosto de 2016
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1 comentario:
Apenas encontré este blog. Lo poco que he leído es, justamente, lo que he estado buscando durante mucho tiempo, años. Gracias.
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